California se ha convertido en un infierno literal tras los devastadores incendios forestales que han azotado varios condados del estado.  Las llamas han consumido más de 14.000 hectáreas, amenazando numerosas viviendas y estructuras, de las cuales más de 5.000 han sido destruidas.  Hasta el momento, se reportan al menos diez fallecidos, pero la cifra podría aumentar debido a los desaparecidos.  Los bomberos trabajan sin descanso para contener el avance del fuego, pero las altas temperaturas y los fuertes vientos dificultan sus labores. Se espera que Los Ángeles establezca un toque de queda para contrarrestar los saqueos.   #California   © LaTijera