En Manicaragua, Villa Clara, un día entero para poder enterrar a un ser querido fallecido.   En el Cementerio de Manicaragua, en el barrio de Seibabo no hay capacidad para enterrar un cadáver, ni en un panteón particular, ni del Estado.   Los familiares de estas dolorosas imágenes le tuvieron que suplicar a una persona para que les cediera el permiso y poder darle sepultura a ser querido.   Después de resolver en sitio para el entierro tuvieron que esperar varias horas en el campo santo con el ataúd a la interperie por otra autorización más, el sepulturero les explicó que el no tenía la culpa de lo sucedido. Solo cuando dijeron que se llevaban el ataúd y lo iban a enterrar en el patio de la casa, fue que finalmente en la noche se procedió a su entierro.   Ya en Cuba se han perdido todos los valores y la empatía, no hay respeto ni con los difuntos y sus dolientes.   © LaTijera